viernes, 26 de noviembre de 2010

Ruta de senderismo: Por las faldas de Peña Sagra

Hoy describiremos una ruta que discurre por los valles formados por el río Vendul y tributarios, a su vez afluentes del Nansa por su parte occidental. Aunque no presentan unos valores naturales excesivamente resaltables, podemos destacar las amplias perspectivas de la sierra de Peña Sagra por su parte sur, un extenso acebal y las vistas sobre el emblemático pueblo de Tudanca.

Dificultad: Media
Orientación (sin GPS con track o cartografía): fácil
Belleza: Normal
Tiempo: 4horas 45 minutos (19,5 kilómetros)


Situación.

Para acceder a San Sebastián de Garabandal, punto de partida de la ruta, debemos seguir la A-8 en dirección a Oviedo hasta Cabezón de la Sal. Tomaremos la carretera que remonta el valle del Nansa hasta llegar al municipio de Cabuérniga y capital, Valle. Desde aquí seguimos hacia la derecha superando el collado de Carmona hasta llegar a la localidad de Puentenansa.
Una vez allí nos desviamos a la izquierda y ya en Cossio, hacia la derecha; tomando la pista que conduce a San Sebastián en unos 5 kilómetros adicionales de moderado ascenso. Dejaremos el coche a la altura de las primeras casas, en una especie de plaza-ensanchamiento.

Puntos de Interés
Vistas sobre peña Sagra. Acebal de Abellán, cursos de los arroyos, manchas de bosque autóctono, vistas sobre Tudanca.

Descripción de la Ruta
Desde el punto indicado tomaremos la calle de la izquierda y muy pronto la segunda calle a la izquierda. Si no nos hemos equivocado abandonaremos rápidamente el pueblo por una pista cementada entre cercas, a la altura de una señalización del camino a Castilla.




De hecho la primera mitad de la ruta de hoy se corresponde con el antiguo camino que empleaban los pobladores de Rionansa y Lamasón para llegar a Castilla a través de Polaciones, hasta que la tecnología permitió abrir la carretera paralela al Nansa. No obstante no nos fiaremos mucho de las señales de este sendero señalizado por el Ayuntamiento de Rionansa, ya que nos puede llevar a confusión para el trayecto que pretendemos recorrer.

Rápidamente llegamos a una zona más abierta, a unos cientos de metros del fondo del río o Arroyo Vendul, principal corriente de agua de esta zona. A los 500 metros rechazamos un primer camino a la derecha, bajamos un poco y volvemos a rechazar, al cabo de un kilómetro, un nuevo camino a la derecha, de modo que seguiremos sin alejarnos en demasía del cauce del río.





De hecho poco después del último cruce afrontamos un pronunciado descenso alcanzando y cruzando el cauce del arroyo citado a los dos kilómetros de recorrido total. Desde este punto comienza un tramo muy duro de ascensión, ya que en unos tres kilómetros deberemos subir de los quinientos metros de este punto a más de ochocientos.

Las duras rampas se afrontan alternando tramos rectos con varias revueltas, de modo que alternativamente estaremos orientados o bien hacia el pueblo de partida y la sierra del escudo de Cabuérniga, al fondo, o bien hacia el alargado perfil de la sierra de Peña Sagra, con el macizo prisma del Cornón, a mas de 2000 metros de altura, como punto culminante. Al otro lado de la sierra se encuentran los valles de Liébana, contribuyendo con ello al clima tan peculiar de dicha comarca.


La vegetación por su parte, alterna prados con áreas de bosque en proceso de recuperación, con muchos claros ocupados por el estrato arbustivo. De hecho esta será la tónica dominante en la mayor parte de la ruta. El camino es fácil de seguir pues tan sólo tendremos un camino secundario a la izquierda, hacia el kilómetro 3 y a la altura de una de las revueltas.



A medida que ganamos altura los árboles van siendo cada vez más escasos, estando representados fundamentalmente por acebos. Finalmente en el kilómetro 5 termina la parte más dura de la ascensión, coincidiendo un pequeño cambio de vertiente y, al hilo de lo anterior, nos internamos en lo que se puede denominar con propiedad un bosque de acebos, ya que cubren buena parte del área más próxima. Un ecosistema sin duda de gran valor.


Tras ascender un poco más, acabamos llegando a una especie de nave en regular estado de conservación, caracterizado por un tejado de pizarra negra, a la que se encuentra anejo un cercado. Desde aquí volvemos a acceder al valle alto del Vendul observando ya toda la falda de la sierra de Peña Sagra e incluso el camino que bordea la misma y que constituye nuestra ruta de regreso.



Sin mayores novedades seguimos avanzado por el acebal de Abellán. Nos encontramos un par de paneles informativos y, finalmente en el kilómetro nueve de recorrido total llegamos al herboso collado de Abellán, en donde encontraremos varios paneles informativos. Nuestra opción ha de ser el camino que, girando casi 180 grados a la derecha, nos lleva de vuelta a San Sebastián, pero antes merece la pena avanzar unos metros por la pradera, un poco hacia la derecha, para poder ver los pueblos de Tudanca y La Lastra varios centenares de metros por debajo del punto en el que nos encontramos.




Tal y como reza el cartel nos quedan 11 kilómetros hasta San Sebastián, que se harán un tanto monótonos por lo abierto del paisaje. La primera mitad discurre por la faldas de la sierra, sin apenas descender de altitud, y cruzando los pequeños torrentes que bajan desde la parte alta, todos con un cartel informativo de su nombre. Por otro lado, a la altura del único repecho que encontraremos en este tramo, se sugiere una ruta para el ascenso al Cornón.







Faltando unos cinco kilómetros para el punto de llegada el camino empieza a descender más claramente, casi al mismo tiempo que pasa a orientarse en dirección noreste. Nos sirve de guía un pequeño arroyo casi seco en su parte alta al aprovecharse como captación de agua potable.

Cuando llevamos unos 18 kilómetros de recorrido total, algo después de que el camino se haya transformado en pista asfaltada, hemos de obligarnos a tomar el desvío que a mano derecha nos obliga a afrontar una dura rampa. Serán solo unos doscientos metros y nos permitirá reducir el trayecto y evitar un último ascenso final, además de ofrecernos una panorámica sobre el pueblo.


En efecto, al llegar a un depósito de agua se acaba la rampa y observamos a nuestros pies San Sebastián de Garabandal, a donde llegaremos sin mayores contratiempos.


Comentarios
Aunque la ruta es algo larga, se puede afrontar sin mayores problemas sin no tenemos prisa. Poco después del collado de Abellán, nos encontraremos una fuente natural acondicionada para beber y para llenar nuestra cantimplora. La ruta es bastante adecuada para realizarla en bicicleta de montaña, aunque tal vez algo mejor en sentido inverso.

He querido dejar para el final los comentarios referidos a San Sebastián de Garabandal. El día que realicé la ruta me encontré con que buena parte de la gente hablaba en inglés, también sorprende la reconstrucción de edificios y la presencia de un buen número de apartamentos en un pueblo fuera de las principales rutas turísticas. La razón está en unas supuestas apariciones de la Virgen María (no reconocidas por la Iglesia Católica) en el lugar. Existe un vía crucis y una capilla en la ladera que se eleva sobre el pueblo y hay cierto número de creyentes extranjeros que acuden al lugar.

Track de la ruta



3 comentarios:

  1. Buenos días.
    Ayer pudimos disfrutar de esta ruta, y aunque con un poco de frío, resultó ser muy chula.
    Muchas gracias por la información. A ver si podemos hacer alguna más de las que tienes en el blog.

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  2. A ti por el esfuerzo de subir las fotos y explicar las rutas que así da gusto ir a cualquier lado a caminar ya sabiendo por donde hay que ir.

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